Según algunos estudios sobre el aprovechamiento del tiempo de trabajo en la empresa, se dan las siguientes situaciones:
- Aproximadamente un 98% de las trabajadores envían correos electrónicos durante la noche o el fin de semana.
- Además, alrededor del 63% confiesa abiertamente que revisa sus correos del trabajo cada 12 horas, dentro de su tiempo no laboral.
- Un 53% se detiene mientras está comiendo para atender una llamada de trabajo.
- Casi un 60% de trabajadores con responsabilidad directiva toma decisiones de trabajo estando en casa en sus horas de “descanso”
- Algo menos del 3% no ha hablado ni enviado/recibido mail durante su periodo de vacaciones.
También el Ministerio Español de Trabajo ha publicado recientemente estadísticas relativas a la productividad en España:
- Un 35 % del tiempo de trabajo es el que se destina a actividades de la empresa que generan valor y rentabilidad
- Solo un 45% de la jornada laboral se puede considerar productiva
- Por tanto, hay un 20% tiempo laboral que se pierde.
¿En qué se pierde ese tiempo? Según consultoras bien posicionadas en España:
- 45% Internet (uso personal)
- 23% Hablando con compañeros
- 7% Realizando negocios personales
- 4% Esparcimiento
- 3% Recados fuera de la oficina
- 2% Llamadas telefónicas personales
- 1% Buscando nuevos empleos
- 1% Haciendo planes personales
- 1% Llegar tarde
- 13% Otros
Una vez más, los datos ponen a España en los últimos lugares a nivel europeo y mundial. Somos realmente muy poco productivos. Y por añadidura, muy poco flexibles.
A menudo las empresas se preguntan qué hacer para mejorar su productividad y su flexibilidad. Quizás una primera medida sería conseguir que todos nosotros seamos conscientes de nuestro tiempo y de cómo lo empleamos. El tiempo es, no importante, sino crucial. Y no todos sabemos cuánto tiempo dedicamos a leer correos, contestarlos, a reunirnos, etc. Además, un alto porcentaje de directivos afirman que tienden a tomar decisiones importantes por percepciones e intuiciones, incluso sabiendo que estas les pueden llevar a engaño.
Varias escuelas de negocios han hecho un estudio entre empresarios y el sentir general de estos es que el teletrabajo no es adecuado. Opinan que ejecutar las tareas desde casa supone un gran riesgo potencial de pérdida de tiempo por parte del trabajador (por supuesto, ellos se excluyen de esta creencia). Está claro por tanto que falta mucha cultura de flexibilización en nuestro país.
Muchas consultoras estratégicas españolas apuestan por medir y en especial, por medir todo. Defienden que es el primer paso y que ello puede permitir tener mayor conocimiento del uso del tiempo de trabajo, poder tomar decisiones más adecuadas y flexibilizar nuestra sociedad, especialmente en el ámbito laboral y poder favorecer la muy nombrada conciliación familiar.
Propuestas tales como métricas, objetivos y corresponsabilidad entre trabajadores y empresa son puntos que se están desarrollando en muchas foros tanto en España como en el resto de Europa. Desarrollos conjuntos dentro la empresa de misión y visión, valores, objetivos generales y específicos, métricas adecuadas para evaluarlos, cuadros de mando integral, mejora continua, transparencia en la información,… se están convirtiendo en indispensables y se está haciendo un esfuerzo importante en su implantación. De hecho, son una realidad ya en un gran número de empresas.
Es importante que se establezca una relación win-win (yo gano y tu ganas) entre empresa y trabajadores. La flexibilidad no está reñida con la productividad. Implantar sistemas de gestión por objetivos, con cuadros de mandos e indicadores que permitan al trabajador en qué nivel esta de desempeño nos ayudará conseguir que estemos ante el trabajador 3.0, ese empleado que posibilita el desarrollo de su trabajo en cualquier lugar, en cualquier momento, y con un alto nivel de autonomía. Si se consigue implantar la flexibilidad de forma exitosa, esto va a reportar grandes beneficios y ahorros a la empresa.
Como conclusión final, estamos en un momento tal que es indispensable que nos adaptemos a este nuevo escenario de flexibilidad productiva. Tenemos mucho que ganar ¡A por ello!
Especialista en optimización y control industrial. Profesor del área de Mantenimiento y Producción en SEAS, Estudios Superiores Abiertos, centro de formación online del Grupo San Valero.