Desde la reciente noticia de que WhatsApp ha comenzado a cobrar por sus servicios a los usuarios con sistema operativo android, el mercado de la mensajería móvil está más revolucionado que nunca. Su precio (0,89€anuales) se puede decir que es algo simbólico, pero muchos se han negado a pagar por el hecho de que siempre les ha sido gratuito, o simplemente porque no se fían de hacer el pago a través del teléfono.
WhatsApp fue fundada en agosto del 2009 por Jan Koum y Brian Acton, dos extrabajadores de Yahoo que decidieron asociarse para aunar sus conocimientos en programación. La idea inicial era crear una aplicación para saber si un usuario está conectado o no para ponerse en contacto con él. Como no tuvo mucho éxito, aprovecharon las ventajas de los smartphones y móviles con tarifa de datos para añadir un chat gratuito y sustituir a los sms. A partir de ese momento, las descargas se dispararon hasta llegar a los 250 millones de usuarios con los que cuenta actualmente.
Aparte de WhatsApp como ya os comentamos en anteriores post (WhatsApp y sus competencias I y WhatsApp y sus competencias II) existen numerosas aplicaciones de mensajería instantánea similares (Viber, ChatOn, Spotbros, WeChat, etc.), las cuales están haciendo que cada día enviemos menos sms. De momento, la única que le está ganando terreno a WhatsApp y está poniendo en peligro su hegemonía es LINE.
LINE fue creada por la compañía Surcoreana de internet NHN a raíz del terrible terremoto que sacudió Japón en marzo del 2011, el cual, hizo caer las redes de telefonía. En un principio, los trabajadores de NHN la crearon para comunicarse entre ellos, pero tres meses más tarde la pusieron disponible para el público en general. Fue bautizada con el nombre de LINE (línea) debido a las largas colas que formaba la gente frente a los teléfonos públicos, ya que éstos, tienen prioridad sobre cualquier red de telefonía de Japón durante y después de una catástrofe. Actualmente LINE cuenta con más de 150 millones de usuarios en todo el mundo (50 millones en los últimos 4 meses).
A continuación vamos a hacer un breve análisis de estas dos aplicaciones para ver sus diferencias, ventajas e inconvenientes:
Tal y como todos sabemos, tanto con LINE como con WhatsApp podemos enviar mensajes de texto instantáneos, fotos, vídeos, emoticonos y nuestra ubicación. Pero la principal diferencia, es que con LINE también podemos realizar llamadas VoIP (llamadas telefónicas a través de la red de internet) totalmente gratuitas.
Las dos aplicaciones cuentan con emoticonos pero LINE además, también cuenta con stikers (emoticonos gigantes de diseño avanzado más expresivos y coloridos) que le dan un toque más divertido.
En cuanto a compatibilidad, tanto whastApp como LINE son compatibles con los sistemas operativos: android, IOS, simbyan, windows phone y nokia. LINE además, también se puede instalar en PCs y mac. De esta manera, podemos realizar una llamada desde un pc a un móvil, o de un pc a otro pc.
En cuestión de seguridad, LINE parece ser más segura que WhatsApp. Hasta hace poco, whatsApp no encriptaba los datos, lo cual daba la posibilidad de que cualquier persona con conexión a la misma red pudiera leer nuestras conversaciones con una aplicación concreta. WhatsApp ha comenzado a cifrar los datos con un hash MD5, que viene a ser el número IMEI de nuestro móvil pero escrito al revés. Con lo cual, el cifrado sigue sin ser seguro al 100×100.
Es recomendable que, si pensamos que estamos siendo espiados no utilicemos la red WIFI, sino nuestra conexión de datos. Por otro lado, cualquier usuario que se haga con nuestro número de teléfono puede contactar con nosotros.
Line dispone de un mecanismo de seguridad que lo impide.
A la hora de añadir un contacto, en WhatsApp es imprescindible tener su número de teléfono. Con LINE podemos agregarlo de 4 formas diferentes:
- Con el ID de usuario; puedes crear tu ID, hacerlo público y permitir que otros usuarios puedan añadirte a través de él.
- Leyendo el código QR; hay una opción en la que se muestra una cámara que actúa de scanner de códigos QR.
- Juntando los dos dispositivos y agitándolos.
- Número de teléfono.
También existen diferencias en el chat; LINE no muestra si estamos conectados o no, con lo cual, guarda cierta privacidad respecto a WhatsAPP. Tampoco muestra si estamos escribiendo un mensaje, aunque esto, más que una ventaja puede ser un inconveniente, ya que muchas veces te pisas los mensajes con el otro usuario o te quedas mirando la pantalla sin saber si te están escribiendo o no.
LINE también dispone de aplicaciones complementarias que puedes descargar gratuitamente, como por ejemplo: Line Camera, Line Card y Line Brush. La primera te permite hacer fotos, escribir sobre ellas, añadirles filtros y después compartirlas. Con la segunda podemos personalizar postales editándolas con texto y stikers y enviarlas. Con la tercera puedes editar y dibujar fotografías con 27 estilos diferentes de pinceles.
Aunque parezca que Line supera a Whatsapp en todos los aspectos, precisamente “la sencillez” de whasapp es una de las claves de su éxito. Mucha gente lo único que quiere es comunicarse con otras personas de una manera sencilla. Otra de las ventajas fundamentales con las que cuenta whastsapp es que de momento cuenta con un mayor número de usuarios. De esta forma, si en nuestro WhatsApp contamos con 180 contactos y en LINE contamos con 50, es probable que WhatsApp la utilicemos más.
Yo particularmente, no sé si en un futuro me inclinaré por una u otra. De momento, siempre y cuando mi dispositivo me lo permita, pienso seguir utilizando estas dos magníficas aplicaciones.
Post publicado por: Andrés Carmona
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