Según la Real Academia de la Lengua Española, RAE, absentismo laboral se refiere a ausencia o abandono del puesto de trabajo y las obligaciones que entraña el mismo. Y como concepto aparentemente análogo, también la RAE propone definir el ausentismo laboral como el abandono, más o menos habitual y duradero, del desempeño de las tareas propias del puesto de trabajo. Parece que es lo mismo y sin embargo hay sutiles diferencias.
Es seguro que hemos vivido la experiencia de ver que un trabajador acude a su puesto de trabajo, pero obtiene bajo rendimiento y siempre hay excusa para ello. Justificaciones mil, ante sus fallos, despistes, necesidad continua de ir al baño abandonando el puesto de trabajo, … O más aún. Hay trabajadores que durante el tiempo de trabajo se dedican a tareas ajenas a las obligatorias que entraña su puesto. También seguro que lo hemos observado. Este tipo de ausencia del puesto del trabajo también encajaría en el llamado ausentismo laboral.
¿Cuál es el motivo de que haya ausentismo laboral?
Parece ser que los problemas personales, tanto en el entorno profesional como el no profesional, generan falta de motivación en los trabajadores y desalineamiento con los valores fundamentales de la empresa. También la propia empresa tiene parte de responsabilidad en el ausentismo ya que, si no hay reconocimientos, se hace una gestión no adecuada de los recursos humanos, hay condiciones laborales inseguras, mala retribución salarial, no se supervisa adecuadamente trabajo realizado y al ejecutante, etc. todo ello ayuda a que esté cada vez más presente. Por supuesto, el perjuicio que ocasiona un elevado nivel de ausentismo supone un impacto económico importantísimo en la empresa.
En cuanto al absentismo, las causas por la que se produce están mucho mas estudiadas. La más habituales son las causas médicas y las de índole familiar. El absentismo suele descender en épocas de crisis, seguramente debido al temor de que la empresa pueda tomar decisiones demasiado severas con la continuidad del trabajador en ella. Influye, como se ha indicado anteriormente, en las finanzas de la empresa y tiene un efecto curiosamente contagioso, sobre todo si no se ven consecuencias en contra de quienes lo practican en exceso. Porque hemos de reconocerlo. Hay trabajadores “expertos” en absentismo laboral que conocen todas las tretas, normas y justificaciones para no tener serios problemas con sus jefes y supervisores.
Como curiosidad añadida sobre el absentismo, las estadísticas demuestran que disminuye en verano.
Cifras de ausentismo laboral en España
Si acudimos a cifras estadísticas, España está afectado por esta circunstancia de forma importante. En 2018 se perdieron alrededor de 1.350 millones de horas de trabajo, 100 millones más que en 2017. En 2019, la cifra no mejoró significativamente, aunque sin llegar a esos datos máximos históricos.
Por comunidades autónomas, destacaron con altos índices de absentismo Castilla y León y País Vasco, siendo Canarias la que presentó un índice menor. Y por sectores, aunque variaba según la geografía española, en general había más absentismo en la industria y menos en la construcción, quedando el sector servicios en un lugar intermedio.
Conforme ha ido pasando el tiempo, las cifras han mejorado mínimamente a pesar de las diferentes medidas que han puesto las empresas para luchar con ello, tales como mejorar la comunicación con el trabajador, instaurar el horario flexible, el teletrabajo y otras medidas que favorezcan la conciliación familiar.
Desde luego, hablemos de absentismo o de ausentismo, debería ser un punto crucial a estudiar y tener en cuenta en la gestión de los recursos humanos de las empresas, debido a su espectacular impacto económico en la cuenta de resultados.
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Especialista en optimización y control industrial. Profesor del área de Mantenimiento y Producción en SEAS, Estudios Superiores Abiertos, centro de formación online del Grupo San Valero.
