Las energías renovables tienen entre sus detractores un punto de crítica en la imposibilidad de gestionar la energía generada.
Por gestionar entenderíamos la capacidad de generar la energía en el momento que sea necesario, aspecto que sí disponen otras tecnologías convencionales como principalmente los ciclos combinados de gas natural. Esta incapaz para la gestión es debida al carácter intermitente y la dificultad de predicción del recurso renovable, principalmente el eólico y también el recurso solar.
A día de hoy, podemos decir que para la tecnología solar termoeléctrica el aspecto de no gestionabilidad ha sido resuelto en una instalación española. La planta solar termoeléctrica de Gemasolar cumple en octubre de 2013 dos años desde su inauguración oficial. Durante estos dos años se ha adquirido una gran experiencia en la operación y mantenimiento de esta planta experimental que ha permitido mejorar sus resultados de forma muy importante.
Gemasolar fue diseñada por la ingeniería SENER y es la primera central termosolar en operación comercial que emplea un sistema de almacenamiento en sales fundidas en una planta de configuración de torre central y campo de heliostatos. Su principal característica que la hace pionera nivel mundial es la capacidad de producir electricidad durante 24 horas ininterrumpidamente sólo con energía solar gracias al sistema de almacenamiento. La potencia de la planta es de 19,9 MW, produciendo anualmente en torno a 110 GWh con 6.450 horas equivalentes de funcionamiento. El verano de 2013 la planta ha logrado producciones continuadas de 24 horas durante 36 días.
Esta noticia representa un antes y un después a la hora de mencionar la ya común frase donde se expone como uno de los principales problemas de las energías renovables la no gestionabilidad e intermitencia en su recurso y por tanto en la generación.
La planta de Gemasolar se presenta al mundo como la más gestionable de las no gestionables. Desde los centros de investigación que en diferentes áreas trabajamos en la integración de energías renovables en la red eléctrica apostamos porque esta sea sólo una de las múltiples soluciones que sirvan para incrementar la penetración de las energías renovables en el sector eléctrico. El desarrollo de sistemas de almacenamiento de energía, vectores energéticos como el hidrógeno, una mayor penetración del vehículo eléctrico y aspectos como soluciones en la gestión de las demanda, smartgrids o generación distribuida deberán aportar las soluciones tecnológicas para lograr el objetivo.
El camino esta empezado, queda continuar.
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